En el segundo amistoso ante Colón, el conjunto alterno del Fortín se impuso 3-0 con una categórica demostración de fútbol. Maxi Romero abrió el marcador en la primera etapa con un golazo; ya en el segundo tiempo, Jorge Correa con una estupenda definición amplió la brecha y Fausto Grillo decretó cifras tras un cabezazo.
El equipo alterno del Fortín continúa demostrando carácter y buen juego tras su tercera presentación en la actual Pretemporada. Un juego sólido, muy pocas fisuras en defensa y un mediocampo aceitado a base de un gran despliegue; fueron los aditamentos necesarios para abastecer a un ataque compuesto en igual dosis por lujos y contundencia. Ganó, gustó y goleó, el Fortín suplente ante su similar de Colón que solo mostró chispazos de ideas claras en los primeros minutos de juego y luego sucumbió ante el poderío del local.
Para el segundo equipo, Omar De Felippe dispuso de: Figueroa; Arena, Toni, Grillo y Jerez; Tripichio, Desábato, Doffo y Correa; Romero y Andrada. Se jugaron dos tiempos de 40 minutos y en la segunda mitad ingresaron Yordan, Mancuso, Durán y Amarilla, en reemplazo de Figueroa, Desábato, Tripichio y Andrada. Por su parte, Colón formó con: Chicco; Ceballos, Olivera, Garcés y Quiroz; Guanca, Bastía, Estigarribia, Blanco; Sandoval y Leguizamón.
En el amanecer del partido fue el conjunto visitante quien encontró mejor los caminos al área rival. En los primeros 10 minutos tuvo el gol dos veces: Primero Leguizamón cruzó mucho su disparo que se fue pegado al vertical derecho y luego Estigarribia, con todo el arco a su disposición, remató por arriba. Vélez tardó en acomodarse y tomar marcas pero cuando logró hacer pie, Leandro Desábato (al igual que en el primer equipo) resultó clave para recuperar el medio. El resto llegó por obra y gracia de los buenos movimientos ofensivos de sus compañeros.
Una de las sociedades que funcionó a la perfección fue la dupla Correa-Romero. El juvenil delantero, de interesantes movimientos toda la mañana en los últimos metros, lo buscó permanentemente a Coco (tal el caso del 2-0) y en la primera que tuvieron juntos, el zurdo enganche remató mordido al lado del palo. Fue el primer aviso del Fortín y en la siguiente no perdonó. Porque cuando parecía que Romero buscaría a un compañero tras controlar el balón, amagó a patear con derecha y salió para el otro lado, quedando solo ante el arquero y sentenciándolo de zurda, cruzado. Gran factura de Maxi para sumar confianza.
Con la ventaja a su favor, Vélez aceleró cada vez que pudo y fue por más. Y al tándem compuesto por Romero y Correa, se acoplaron muy bien Agustín Doffo (manejó la pelota a voluntad) y Federico Andrada que siempre estuvo dispuesto para ir a todas. De igual forma Nico Tripichio auxiliando en la zona media. Y atrás, sobria labor de los centrales (Toni y Grillo) y proclives a provocar daño los laterales, Arena y Jerez, cada vez que se soltaron en ataque. Faltaba rubricar todo el funcionamiento en el resultado. Así, con paciencia, llegó la goleada.
El ingreso de Luis Amarilla volvió a ser productivo, al igual que en último amistoso ante Banfield. El delantero paraguayo se recostó por la izquierda y desde allí inició la jugada del 2-0 con un pase de taco para asistir a Romero. Maxi encaró en diagonal hacia al área y empezó a “relojear” por dónde estaba Coco; al verlo libre, lo habilitó empalando el balón y Correa definió con suma categoría acariciando la pelota por encima del arquero. Golazo.
Al igual que los titulares, el conjunto alterno arrolló a Colón en la segunda etapa. Desde el primer minuto hasta el último. Por eso en los instantes finales llegó el cabezazo de Fausto Grillo para rubricar el resultado y nuevamente Amarilla, haciendo gala de su técnica, brindó un par de lujos que hubieran terminado de culminar la faena.
Muy buena presentación del Fortín, sin fisuras en sus líneas y con alto poder de fuego para hilvanar con goles lo demostrado durante 80 minutos.