Fútbol Amateur

Rótolo: “Se vienen muy buenas camadas”

El Fútbol Infanto Juvenil va cerrando un 2019 estupendo y en la materia prima de sus jugadores, se explican los éxitos. Pero también quiénes los forman merecen reconocimiento. Uno de ellos es Rodrigo Rótolo, el conductor de Categoría 2007 luego de un año inolvidable.

Por Diego Guitian

Un martes caluroso de diciembre puede ser un poco más placentero en la confitería del Polideportivo con una charla amena por delante. Luego de dirigir uno de los últimos entrenamientos del año, Rodrigo Rótolo (35 años) se sienta a dialogar de uno de sus amores: formar jugadores de fútbol. Los otros, se reparten entre su esposa Carolina y las pequeñas Pilar (9) y Victoria (7), sus hijas. La pelota ocupa un lugar muy especial en la vida del entrevistado: coordina el baby fútbol del Club Juventud de Liniers, dirige en un country pero sobre todo, este año condujo a la Categoría 2007 de Vélez a que logre tres títulos sin perder un solo partido y cimente su mote de equipazo con gran proyección a futuro.

El Colo, como se lo conoce popularmente en el mundo del fútbol infantil, asegura que el 2019 fue su mejor año de los siete que lleva en el Club. Deja fluir pasión cada vez que habla de sus dirigidos y a lo largo de una hora desplegará una serie de conceptos para graficar a la perfección cuál es su tarea dentro de la fábrica.

-¿Con qué equipo te encontraste y qué plantel le dejás al próximo entrenador?

-El equipo es el producto de lo que uno desarrolla en la semana. La 2007 tiene muy buenos jugadores pero a comienzo de año estaba un poco inquieto porque no encontraba el funcionamiento que buscaba. Desde lo grupal empezaron siendo conflictivos pero luego hubo un quiebre en las relaciones, tanto mía como de los chicos con el profe. Y empecé a ver que lo que entrenábamos en la semana, se hacía los domingos. Hoy puedo decir que disfruté de ver jugar a la 2007.

-Más allá de que se fueron conociendo mutuamente el cuerpo técnico y los jugadores, ¿dónde estuvo el cambio desde lo futbolístico?

-Sabemos que tienen muy buen pie en general pero el cambio de sistema creo que fue un salto de calidad. Comenzamos con un 4-2-3-1 y fuimos mutando, también jugamos 4-3-3 para poblar más la zona media y así encontrar un mejor rendimiento pero cuando encontramos el triángulo del medio, pudimos darle más soltura a los delanteros. De a poco empezó a aparecer el equipo: nos hicimos sólidos en defensa y en los partidos importantes del torneo, anduvimos muy bien.

El camino que desandó la decimoprimera división para coronarse el Torneo de AFA Infantil fue notable:  15 victorias y 4 empates. Invictos, con 52 goles a favor y 4 en contra. "Desde la coordinación se baja un lineamiento y es intentar jugar siempre, que haya asociaciones, que los chicos conecten, que aprendan a marcar. Queremos jugar todo el tiempo pero no siempre se puede. De todas formas este año la Categoría mostró un gran nivel y sin dudas disfruté de ver jugar a la 2007", remarca por segunda vez Rótolo, convencido que fue así.

-¿El 4-2-3-1 es el sistema ideal cuando tenés buen pie?

-Es un sistema que reparte muy bien los jugadores dentro de la cancha, se cubren bien todos los espacios y favorece mucho a las triangulaciones que uno busca por debajo. También nos permite que con los extremos volviendo, te podés cerrar en la parte defensiva y a su vez atacar con mucha gente. Nuestra idea inicial es siempre jugar la pelota por abajo. Pero también el fútbol es conceptual, entonces si el rival te aprieta con una presión alta, es mejor saltar las líneas porque en algún lugar de la cancha podés provocar un mano a mano. Todo el año buscamos jugar por debajo, lo hicimos muy bien y también supieron jugar encontrando espacios. Siempre buscando darles mayor cantidad de conceptos para que al pasar de año, sean jugadores cada vez más completos.

-Tuviste entre tus dirigidos a Álvaro Montoro de quien se habla cada vez más en la cantera.

-Álvarito es líder y uno debe enseñarle a manejar el liderazgo dentro y fuera de la cancha porque él contagia mucho. Su fuerte es la gambeta, toma buenas decisiones, trabajó mucho en saber dónde provocar daño y no trasladar tanto. Terminó en gran nivel el año y su proyección no tiene techo, pero tuvimos que trabajar mucho en lo actitudinal. A comienzos de año sentí que él tenía mucha presión sobre la categoría, que lo que hiciera iba a depender mucho en el resultado grupal. Veía que agarraba la pelota y quería hacer todo y no es así, lo convencí de que aporte al equipo para que se logre el resultado y no que ganar o perder dependa sólo de su juego.

-¿Y cómo lo tomó él con 12 años?

-No fue fácil. Se ha fastidiado porque le saqué la capitanía, los penales y la camiseta número 10. Luego le fui devolviendo cosas. Álvaro lo entendió e hizo un cambio muy grande cambiando el puesto, porque siempre fue enganche y este año lo puse de extremo por izquierda, logrando lastimar más en el uno contra uno. Y lo hizo muy bien. Sus condiciones no las tiene cualquiera pero logramos no depender tanto de él. Viendo su crecimiento, te digo que aunque costó, fue un placer haberlo dirigido.

-En lo personal, ¿cómo te encontrás a punto de arrancar tu octava temporada dentro de la Institución?

-Soy un agradecido de estar acá y eso te demanda mejorar, perfeccionarse y estar a la altura de lo que exige el Club. Siento que Vélez no para de crecer. Siempre hay obras que potencian la enorme estructura, por ejemplo el Campus que es un gran acierto para sumar más canchas. Hoy le toca a estar a Sebastián Pait en la Coordinación General y siento que no paro de sumar nuevos conocimientos porque nos clarifica mucho, de igual forma con Hernán Cabrera en Infantiles, con quien tengo una relación muy fluida y aprendí de él todo el tiempo desde que llegué al Club. Año a año que fue pasando, logramos un grupo humanamente muy fuerte y se ve reflejado en el trabajo diario y la amistad que logramos. 

En un Club como Vélez, donde los jugadores de sus inferiores llegan permanentemente al primer equipo, cualquier entrenador de la cantera que lleve más de 5 años trabajando, vio crecer de cerca a más de uno. En el caso de Rodrigo Rótolo inició sus labores a cargo de la Categoría 2002 de Federico Versaci, Luka Konig y Lautaro Cano, entre otros, pero también siguió muy de cerca a los Thiago Almada, Luca Orellano, Álvaro Barreal, y un poco más chicos a Maxi Perrone, Elías Cabrera, Facu Pimienta y Thiago Sánchez.

-¿Qué te genera verlos llegar?

-Escucho que este año crecieron un montón y me llena de orgullo. Vélez tiene los jugadores, la estructura en captación es muy buena y la vara cada vez está mal alta porque no es fácil incorporar. Y no lo digo por los resultados, pero no es casualidad que este año hayamos ganado la Tabla General de Juveniles e Infantiles y que siempre estemos peleando todos los torneos. Eso muestra que hay buenos profesionales en todas las áreas pero también que la materia prima es de calidad. Los hinchas tienen que estar muy tranquilos de cara a futuro porque Vélez tiene muchos jugadores para dar en todas las Divisiones.